Estudio florístico de las Lomas de La Canoa para una reserva florística manejada (Cuba)

Introducción

Uno de los recursos naturales sobre los cuales el impacto antrópico ha resultado más intenso es la vegetación. Al respecto, en la obra Árboles de Cuba el sabio botánico Johannes Bisse, durante su análisis de las fitocenosis, expresó: El desarrollo de las actividades y la consecuente transformación de la naturaleza que avanza actualmente con rapidez, pone en peligro de desaparecer unas cuantas especies arbóreas que poseen un área limitada de distribución y aparecen en poblaciones poco numerosas. Bisse (1988)

Esta situación se hace más preocupante si se tiene en cuenta el alto endemismo que caracteriza a la flora cubana: las plantas autóctonas del archipiélago cubano representan el 90 % del total de la flora, las que están actualmente confinadas a diversos refugios, que en su conjunto representan un 25% del territorio nacional, especialmente en áreas de difícil acceso. Esto explica que en el país se priorice la conservación ex situ e in situ y que el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, haya establecido varios programas nacionales dedicados a este propósito, entre ellos el Programa Nacional de Biodiversidad.

En el año 2001, la UNESCO aprueba la Reserva de Biosfera Buenavista, se localiza en la región centro norte del archipiélago cubano, e incluye gran parte del municipio Yaguajay. Los diversos ambientes terrestres, costeros y marinos que incluye esta reserva, tienen una gran significación como zonas de alta sensibilidad ecológica, elevada biodiversidad y notable fondo genético, a los que se suman sus valores florísticos, faunísticos, espeleológicos y paisajísticos.

Estos espacios constituyen verdaderos refugios de biodiversidad, de ahí la importancia de mantener un estricto control y el establecimiento de planes de manejo y preservación. En ese caso están las Lomas de La Canoa. Por las características propias de la zona, predominan las formaciones cársicas bien desarrolladas, las que propician el desarrollo de diferentes comunidades y formaciones vegetales.

Materiales y métodos

Materiales utilizados.

En la presente investigación se utilizó la información contenida en:

–Inventarios: fueron revisados los inventarios florísticos del Parque Nacional Caguanes y el Área Protegida de Recursos Manejados Jobo Rosado, los cuales están contenidos en sus respectivos Planes de Manejo (actualizados y en ejecución

–Literatura ecológica: se consultó la literatura disponible sobre este tema: el Estudio Geográfico Integral del Municipio Yaguajay, Norte de la Provincia de Sancti Spíritus. Cuba, Chirino et al (1996), donde aparecen los estudios de vegetación de las diferentes formaciones vegetales y el listado florístico del municipio, con sus correspondientes mapas temáticos que incluyen el sector seleccionado para el estudio.

-Observaciones personales: por los conocimientos del autor y los colaboradores acerca de la zona de estudio, así como de las dos áreas protegidas presentes en el municipio se contribuyó a complementar la información contenida en las fuentes anteriores.

Dado que la investigación fue concebida para desarrollarse en diferentes etapas, los restantes materiales utilizados en la misma, se explican dentro de cada una de esas etapas:
a)- Inventario florístico: Para su realización, se ubicó la zona de estudio en un mapa topográfico a escala 1:25 000, sobre el que se planificaron los transectos a realizar según las áreas mejor conservadas dentro de la poligonal establecida, de modo tal que abarcara las diferentes formaciones vegetales presentes.
b)- Colecta y herborización: La colecta de las plantas se realizó con el auxilio de los materiales necesarios en este tipo de trabajo: tijera de poda manual, sacos de colectas, libreta de campo y lápiz. Para la herborización se utilizaron los materiales clásicos para esta actividad: papel periódico, cartón corrugado al tamaño del papel, prensas de cartón y cuerdas para el amarre.

c)- Identificación de especies: Los materiales colectados, fueron determinados a partir de la experiencia del autor y sus colaboradores en el terreno, o por comparación en tres herbarios cubanos con ejemplares de referencia confiables y la utilización de claves dicotómicas y descripciones que aparecen en los tomos de la obra Flora de Cuba, de los hermanos León y Alain (1946 y 1969) y en los Fascículos de la Flora de Cuba. También colaboraron en esta tarea, especialistas en la materia, pertenecientes al Instituto de Ecología y Sistemática.

Al elaborarse la lista florística de todos los táxones de las plantas vasculares que aparecieron en el área, se ordenó de forma alfabética, agrupándolas por familias, géneros y especies. En la nomenclatura de los taxones, se siguieron los criterios de León y Alain (que aparecen en la obra citada) y de los Fascículos de la Flora de Cuba.

Métodos de estudio de la flora

Método fisionómico.

Para describir las formaciones vegetales, se consideraron los estratos presentes en cada una de ellas (emergente, arbóreos, arbustivo, herbáceo y sinucia), realizando las mediciones correspondientes en cada uno de ellos. Como resultado de esto, se obtuvieron los perfiles de vegetación que ilustran las principales características de las diferentes formaciones vegetales existentes en los tramos seleccionados (dichos perfiles abarcaron 20 m de largo por uno de ancho).

Método cartográfico.

Toda la cartografía utilizada en la elaboración de este trabajo fue realizada sobre base digital de 1: 25 000, utilizando una microcomputadora Pentium IV, Intel Celerón 1.6 GHz, con sistema operativo Windows XP. Se utilizó además para el trabajo cartográfico digital, el software MapInfo 8.5 SCP como soporte de trabajo.

Método de análisis documental.

Dentro de los estudios de conservación de la flora, se analizaron las especies presentes dentro de la zona de estudio que tuvieran alguna de las categorías de amenazas, según la Lista Roja de la Flora Vascular Cubana.

Para cada especie de las incluidas en alguno de los listados existentes sobre plantas amenazadas en Cuba, se valoró su estatus actual.

Las relaciones de afinidad florística con territorios adyacentes se determinó según la distribución geográfica de las especies, tomando como base los criterios de León y Alaín (1946 – 1969) y otros estudios de floras regionales más recientes que permiten una mayor actualización de los datos obtenidos (Acevedo et al. 1996; Adams, 1972; Correll et Correll, 1982; Leiva, 1992 y Liogier, 1982) citado por: Castañeda (1999).

Potencialidades económicas de la flora

En el potencial económico de la flora se determinó a partir de una búsqueda bibliográfica, donde se establecieron tres grupos fundamentales: maderables Fors (1968); I.N.D.A.F. (1970); medicinales Roig (1974); Fuentes (1988) y melíferas Acuña (1970); Ordext (1978), citado por: Castañeda (1999).

Representatividad de la flora local en las dos áreas protegidas con administración dentro de la parte terrestre de la Reserva de Biosfera Buenavista y en todo el municipio de Yaguajay.

Se analizó la representatividad de todas las especies de plantas superiores existentes en la zona de estudio, en relación con las dos áreas protegidas con administración presentes en Yaguajay y que son zonas núcleo de la Reserva de Biosfera Buenavista y centros principales de la conservación in situ en el territorio: el Parque Nacional Caguanes (de significación nacional) y el Área Protegida de Recursos Manejados Jobo Rosado (de significación local).

Para el levantamiento de la información, se confeccionó un listado de presencia – ausencia, donde se muestran las especies registradas para la zona de estudio, para las citadas áreas protegidas y para el municipio de Yaguajay.  

Propuesta y zonificación para áreas protegidas.

Para la determinación de como declarar el área de estudio como un área protegida, con la respectiva categoría de manejo y zonificación funcional, se siguieron los pasos establecidos en la Metodología para la elaboración de los Planes de Manejo de las áreas protegidas de Cuba. Gerhartz (2008)

Análisis de los resultados

Características físico-geográficas del área de estudio.
El área de estudio seleccionada se localiza en la porción central de las Lomas de La Canoa, donde existe un importante reservorio de biodiversidad, que se ha conservado hasta los días de hoy por lo agreste de su relieve, donde predomina el lapiés o diente de perro, con un gran desarrollo. Geográficamente el área se encuentra entre los 22( 14" 06"" de latitud norte y los 79( 07" 06"" de longitud oeste en el punto más norteño, los 22( 11" 37"" de latitud norte y los 79( 04" 10"" de longitud oeste en el punto más sureño, los 22( 11" 58"" de latitud norte y los 79( 03" 38"" de longitud oeste en el punto del extremo este y los 22( 13" 55"" de latitud norte y los 79( 07" 40"" de longitud oeste en el punto más al oeste, aproximadamente a 1 300 m al S-SW del pueblo de Mayajigua. (Anexo 2)

Según la fitorregionalización de Borhidi y Muñiz (1986) (citado por: Castañeda 1999), se encuentra situada en la subprovincia Cuba Central, sector Camagüeyicum (Cuba Centro Oriental), distrito Sagüense. Valdés-Lafont y Capote (1989) (citado por: Castañeda 1999). Los primeros estudios sobre la flora del distrito Sagüense, se realizaron en la segunda década del siglo XX y estuvieron a cargo de Erik Leonard Ekman y el Hermano León, quienes colectaron un valioso herbario que sirvió como contribución al conocimiento de la flora presente en este distrito.

Es a finales de la década del ochenta del propio siglo XX, que Valdés – Lafont y Capote ofrecieron una lista florística donde aparecían 164 táxones infragenéricos en las Alturas del Nordeste, los cuales estaban agrupados en 60 familias botánicas; donde aparecía un endemismo del orden de 10,9 %, predominando los elementos pancubanos.

Aunque el endemismo local es pobre para su definición (Thrinax ekmaniana, Tabebuia saxicola y Gaussia spirituana), existen otros elementos florísticos que le brindan identidad al mismo, como por ejemplo: Agave legrelliana, Tabebuia beyeri, Tabebuia anisophylla, Mamillaria prolifera, Anthurium cubense, Pilosocereus sp., Gastrococos crispa y Calyptronoma plumeriana.

Caracteriza a este distrito la existencia de humedales aledaños a las alturas cársicas de Mogotes de Jumagua, El Purio y Tasajera (Lomas de Platero), así como la Ciénaga de Guayabera, que se ubican en la parte que le corresponde a la llanura septentrional.

La llamada Cordillera del Nordeste de las Villas, situada al norte de Cuba Central, constituye un gigantesco anticlinorium de 200 Km de extensión, donde las rocas calizas son las más abundantes, con una antigüedad que oscila entre el Jurásico y el Paleógeno; la misma se divide por el amplio valle fluvial del río Sagua la Grande, en las Alturas de Noroeste y las Alturas del Nordeste. Núñez Jiménez (1972). Estas últimas se alinean frente a la costa norte de las provincias de Villa Clara, Sancti Spíritus y Ciego de Ávila, donde se alzan serranías como las de Bamburanao, Meneses y Cueto, la Canoa y Jatibonico.

En el municipio de Yaguajay, a pesar de la modificación de muchos de sus ecosistemas, en algunas zonas se pueden apreciar los principales elementos que distinguen a este distrito. En la Cordillera del Nordeste de Las Villas y en otras alturas residuales dentro del territorio yaguajayense aún se conservan bosques semideciduos o secundarios con diversidad de especies vegetales claves que están presentes en esta fitorregionalización.

Estas sierras son descritas como series de cadenas de dirección sublatitudinal, con altitud predominante de 100 a 300 m.s.n.m. (aunque algunas cimas sobrepasan los 400 m.s.n.m.). Ellas se distribuyen de manera fragmentaria, con un ancho que oscila entre uno y cinco kilómetros.

Inventario florístico del área de estudio.

En el área estudiada se identificaron 454 especies de plantas vasculares, las cuales se agrupan en 342 géneros y 95 familias.

Las familias mejor representadas son: Orchidaceae, con 31 especies, Fabaceae, con 28, Euphorbiaceae, con 23, Rubiaceae con 20, Asteraceae con 16, Mimosaceae con 13, Bromeliaceae y Malvaceae con 12, Poaceae y Boraginaceae con 11 y Bignoniaceae, Sapindaceae y Solanaceae con 10 especies respectivamente. Coincide con lo planteado por Vales. En la figura 4 se hace una representación de las mismas.

Los géneros que agrupan una mayor cantidad de especies son Tillandsia con ocho especies, Solanum con seis, Casearia, Cordia, Ficus, Ipomoea, Pasiflora y Senna con cinco, mientras que Adiantum, Cissus, Encyclia, Eugenia y Philodedron agrupan cada uno cuatro especies. La figura 5 reporta los géneros con mayor número de especies.

Del total de especies presentes en el listado florístico, 51 son endemismos cubanos, lo que representa el 11,2 %.

De acuerdo a la distribución de los endemismos cubanos, se obtiene lo siguiente: son comunes a Cuba Oriental y Cuba Central una especie (0,2 %); de Cuba Occidental y Cuba Central, 11 especies (2,4 %), de Cuba Central, dos especies (0,4 %), y un taxa (0,2 %) es exclusivo de las Lomas de la Canoa y la sierra de Jatibonico en el distrito Sagüense, Gaussia spirituana. El mayor número corresponde a los de mayor distribución (Pancubanos), con 37 especies (8,1 %). Esta cifra coincide con lo planteado por Valdés – Lafont y Capote, cuando estudiaron los táxones infragenéricos en las Alturas del Nordeste y aparecía un endemismo del orden de 10,9 %, donde predominan los elementos pancubanos.

Relaciones de afinidad florística.

El mayor número de geoelementos correspondió al neotrópico, con 141 especies (31,1 %); mientras que los antillanos, con 99 especies (21,8 %) y caribeanos con 84 especies (18,5 %), siguen en orden de presencia los elementos pantropicales con 26 especies (5,7 %), los paleotropicales con 16 especies (3,5 %), la subregión Florida-Antillas con dos especies (0,4 %), la subregión Bahamas con dos especies (0,4 %), por su parte los elementos extratropicales presentan una sola especie (0,2 %) al igual que los cosmopolitas (0,2 %).

Por los datos anteriores, se infiere que la América tropical es la que mayor cantidad de elementos ha aportado a la vegetación del área estudiada, seguida por las Antillas y el Caribe.

También como resultado, se constató que, en el área estudiada, un total de 160 especies (35,0 %), son comunes con el listado florístico del Parque Nacional Caguanes, mientras que la relación con el listado florístico del APRM Jobo Rosado, abarca un total de 240 especies (52,9 %). Es lógico que exista una mayor relación, puesto que ambas localidades se encuentran en la misma zona fisico-geográfica que forma la cordillera. En el estudio geográfico integral del municipio Yaguajay aparece un listado florístico con un total de 400 especies de todos los ecosistemas del municipio, de las cuales 304 especies (67,1 %), coinciden con el listado del área.
Por tanto, un conjunto de 150 especies (33,3 %), constituyen un nuevo reporte para la zona de estudio y para el municipio, al no aparecer en la bibliografía consultada.
Descripción de las formaciones vegetales en el área de estudio.
El área de estudio constituye una reserva de vegetación natural de Cuba Central y específicamente de la Reserva de Biosfera Buenavista, con diferentes formaciones vegetales naturales y otras con vegetación secundaria, producto de la antropización que a lo largo de la historia ha ocurrido en el país.

Complejo de vegetación de mogotes (CVM). Como parte de este complejo de vegetación se encuentran el bosque semideciduo mesófilo en la base y en las pendientes más suaves y la vegetación de los farallones y de las cimas. El bosque semideciduo mesófilo aparece en la base de los farallones que se encuentran en la parte norte del área y en las laderas más suaves de las elevaciones. Estos bosques alcanzan una altura de 8 a 14 m, con dos estratos arbóreos y aparecen emergentes de hasta 18 m de altura. En el estrato arbóreo superior están presentes Samanea saman, Ceiba pentandra y Roystonea regia; mientras que el estrato inferior está formado por Guarea guidonea, Zanthoxylum martiniscense, Nectandra coriacea, Adelia ricinella, Oxandra lanceolata, Sideroxylon foetidissimum , Dendropanax arboreus, Cordia gerascanthus, Cecropia schreberiana, Trichilia hirta y Celtis trinervia.

El estrato arbustivo es denso y rico en especie, formado por Picramnia pentandra, Erythroxylum havanense, Caseria aculeata, Casearia spinescens, Trichilia glabra, Hamelia patens y Croton lucidus.

El herbáceo es pobre, con Lasiacis divaricata, Olyra latifolia, Pharus glaber, Oplismenus setarius y Oeceoclades maculata. En las zonas más húmedas, asociadas a las rocas se encuentran diferentes especies de helechos como Adiantum capillus-veneris, Tectaria heracleifolia y Pteris longifolia y Pteris vitata.

En zonas más altas donde la inclinación de las pendientes es mayor y predomina como sustrato la rendzina, se aprecia un cambio en la composición florística y fisionómica del bosque. Aquí las especies alcanzan de seis a ocho m, donde sobresalen Celtis trinervia, Calycophyllum candidissimum, Adelia ricinella, Oxandra lanceolata, Cordia gerascanthus, Citharexylum fruticosum, Ceiba pentandra, Colubrina arborescens, Ficus laevigata, Jacaranda coerulea, Plumeria obtusa, Gossypiospermum praecox y Cordia collococca,

El estrato arbustivo es denso y alcanza generalmente tres m de alto, donde aparecen Erythroxylum havanense, Picramnia pentandra, Croton lucidus, Schaefferia frutescens y Capparis flexuosa; mientras que el estrato herbáceo es pobre formado por Laciasis divaricata, Oeceoclades maculata, Olyra latifolia entre otras.

En las cimas y paredones de los farallones y sobre las áreas donde se encuentra un lapiés muy abrupto con escasez de suelo, se desarrolla un bosque bajo y abierto con árboles de hasta seis m de alto y un estrato arbustivo denso. En el estrato arbóreo están presentes, Ateleia apetala, Celtis trinervia, Citarexylum fruticosum, Ficus laevigata, Gaussia spirituana, Gerascantus gerascanthoides, Gymnanthes lucida, Guapira discolor, Adelia ricinella, Hebestigma cubense, Plumeria sp. y Savia sessiliflora; en el estrato arbustivo predominan Capparis flexuosa, Erythroxylum havanense, Bernardia corensis, Exostema caribaeum, Comocladia dentata y Pilosocereus robini. El estrato herbáceo está casi ausente, están presentes individuos aislados de Olyra latifolia y Oplismenus setarius entre otros.

Bosque semideciduo mesófilo (BSDME). Este bosque está presente en las laderas no muy pronunciadas, en la base de los farallones y en las zonas llanas u onduladas de la parte alta de la sierra, aquí la vegetación alcanza una altura de 12 a 15 m , con dos estratos arbóreos y algunos emergentes que llegan a alcanzar hasta 18 m . En el estrato arbóreo superior se encuentran Ceiba pentandra, Cedrela odorata, Samanea saman, Spondias mombin, Dripetes alba y Calycophyllum candidissimum; mientras que el estrato inferior está formado por Celtis trinervia, Cecropia schreberiana, Colubrina arborescens, Dendropanax arboreus, Cordia gerascanthus, Guarea guidonea, Nectandra coriacea, Oxandra lanceolata, Prunus occidentalis, P. mirtifolius, Sideroxylon foetidissimum, Trichilia hirta, Hebestigma cubense, Zanthoxylum elephantiasis y Zanthoxylum martiniscense.

El estrato arbustivo está formado por varias especies que generalmente tienen una altura de uno a cuatro m aquí se hallan algunas especies del estrato arbóreo, Alibertia edulis, Faramea occidentales y es muy abundante Erythroxylum havanense.

El estrato herbáceo no es muy abundante, aparecen especies como Lasiacis divaricata, Olyra latifolia y Pharus glaber, Oplismenus setarius, Pilea microphylla, Pilea pubescens, Oeceoclades maculata y diferentes especies de helechos, como Adiantum pyramidale y Tectaria heracleifolia.

Bosque de galería (BG). Esta formación vegetal se encuentra asociada a las márgenes de los escasos arroyos que cruzan por el área de estudio. En los lugares más conservados se encuentran dos estratos de 12 a 14 m con emergentes de 17 y 18 m. Aquí crecen las especies más heliófitas de la vegetación circundante como Roystonea regia, Ficus sp., Psedolmedia spuria, Trophis racemosa, Spondias mombin, Licaria jamaicensis entre otras.

Endemismo de las Lomas de La Canoa y Sierra de Jatibonico en el Complejo de Vegetación de Mogotes.

En el área de estudio se encuentran todas las poblaciones de Gaussia spirituana presentes dentro de las Lomas de La Canoa, ubicadas en los territorios que ocupa el complejo de vegetación de mogotes, a continuación se describe la situación de dichas poblaciones.

Especies amenazadas.

Dentro del listado florístico cinco especies están incluidas en una de las categorías de plantas amenazadas según la Lista Roja de la Flora Vascular Cubana (2005); ellas son: Gaussia spirituana, Pouteria dictyoneura, Tillandsia pruinosa, Terminalia eriostachya y Garcinia aristata, todas con la categoría de EN, en Peligro.

Especies con poca representatividad de individuos dentro de la zona de estudio.

Según los recorridos efectuados durante el trabajo de campo, se pudo comprobar que varias de las especies reportadas presentan una escasa distribución dentro de la zona de estudio como son: Bulbophyllum pachyrrhachis. Casasia calophylla. Catalpa punctata. Chascotheca neopeltandra. Ficus jacquinifolia. Ginoria ginorioides. Guettarda urbanii. Homalium racemosum. Machaonia habanensis. Ouratea ilicifolia. Pera bumeliaefolia. Pera opocitifolia. Pleurotalis murex. Pouteria chrysophyllifolia. Pouteria domingensis. Pilosocereus robini. Piper perditum.

Importancia económica de la flora.

La flora estudiada tiene un potencial económico avalado por la presencia de 278 especies útiles al hombre (61,0 %); de ellas 100 maderables (22,0 %), 168 medicinales (37,0 %), 96 melíferas (21,0 %), 56 ornamentales (12,3 %), 10 comestibles (2,2 %), 7 artesanales (1,5 %) y 4 como postes vivos (0,8 %).

Áreas Protegidas propuestas.

Elemento Natural Destacado La Chucha.

Los ricos valores bioespeleológicos que presenta la cueva de La Chucha, con un origen fluvial todavía activo, con más de un kilómetro de galerías, varias trampas térmicas que puede competir con las mayores de Cuba, abundante y diversa quiropterofauna y otros vertebrados e invertebrados troglóbios justifica que se proponga su protección.

La cueva se encuentra en una formación mogotiforme con algunos paredones cársicos y una exuberante vegetación donde se entremezclan el complejo de vegetación de mogote donde aparece la Gaussia spirituana, con el bosque semideciduo mesófilo.

Pero sólo con estos elementos es que se selecciona una pequeña área que ocupa 69,93 hectáreas con la categoría de Elemento Natural Destacado y quedó fuera una rica biodiversidad florística que tiene una perfecta conectividad por encontrarse en la sierra que forman las Lomas de La Canoa.

Reserva Florística Manejada Lomas de La Canoa

Por todo lo anteriormente dicho es que se propone cambiar la categoría del Elemento Natural Destacado La Chucha con 69,93 Ha y aumentar el área a 1 469 Ha, con la categoría de Reserva Florística Manejada. La cual incluye otras localidades conservadas de las Lomas de La Canoa como son la zona al sur de La Chucha, los farallones de Agua Santa, la localidad de Piedra China y el bosque de la zona conocida como La Mina.

En esta nueva propuesta aparecen tres formaciones vegetales naturales como son el complejo de vegetación de mogotes, el bosque semideciduo mesófilo y el bosque de galería, en los cuales existe una rica diversidad florística, donde se han reportado nuevas especies para la zona de estudio y para el municipio, algunos con poblaciones muy escasas que merita la pena conservar para las futuras generaciones. Dentro de la vegetación secundaria existen dos formaciones, el bosque secundario y el matorral secundario, donde en algunas de las zonas cercanas al camino La Picadora-Llanada Arriba, la (UEB) Silvícola Forestal Yaguajay ha realizado reconstrucción de bosque con especies como el Hibiscus elatus y la Colubrina arborescens, que por demás son especies autóctonas.

Dentro del complejo de vegetación de mogotes, que con esta nueva propuesta se incluyen varias localidades, se encuentran todas las poblaciones del endémico Gaussia spirituana, dentro de la sierra Lomas de La Canoa, donde se incluye además una nueva localidad para esta especie, que es la población más occidental de la misma, en el lugar conocido como Mogotito de La Mina.

Es importante destacar que especies escasas dentro del área como Pouteria dictyoneura, Tillandsia pruinosa, Terminalia eriostachya, Garcinia aristata, Pilosocereus robini, Jatropha integerrima, Pouteria domingensis, Bulbophyllum pachyrrhachis, Catalpa punctata, Chascotheca neopeltandra, Ficus jacquinifolia, Ginoria ginorioides, Guettarda urbanii, Ouratea ilicifolia, Pera bumeliaefolia, Pera opocitifolia, Pleurotalis murex, Pouteria chrysophyllifolia y Homalium racemosum, aparecen solamente en esta nueva propuesta, por lo que con estos argumentos se ratifica la misma.

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Parque Nacioanal Caguanes. Yaguajay. Sancti-Spíritus.

Autor:

MSc. Armando Falcón Méndez.

Lic.Juana Zoila Junco Horta.

Lic. Alfredo Domínguez González.