APARTADO II
La evaluación de la enseñanza y el aprendizaje implica que el docente debe interpretar los resultados tanto del estudiante como de la misma actividad del profesor, resultados integrales, es decir, referidos a conocimientos, habilidades, destrezas, aptitudes ya actitudes, así como al cumplimiento de los objetivos y las metas propuestas, en la asignatura, área y nivel educativo.
Como se explicó en el apartado primero de este documento, la evaluación que realiza el docente en el aula no puede ser improvisada, debe responder a una planificación establecida en la institución considerando especialmente estándares de calidad. Esto implica un trabajo de coordinación entre todos los responsables del nivel o del área, en la que cada uno de ellos tenga un dominio absoluto de las metas, los objetivos, la estructura del currículo, del plan de estudios y especialmente del tipo de estudiante que desea formar, en congruencia con la filosofía, los principios, la misión y visión institucional.
La coordinación entre los distintos profesores del nivel o del área permitirá que la evaluación de los aprendizajes, realmente respondan a esas capacidades y competencias que se espera lograr de los estudiantes, de tal forma que todos los docentes en conjunto persigan la mima finalidad formativa de sus estudiantes. No debemos olvidar que la finalidad última de la evaluación es formativa y no punitiva.
Muchos autores recomiendan que los docentes, previa la elaboración de las pruebas, realicen un conjunto de especificaciones en las que se establezcan con claridad los criterios, los contenidos, los objetivos de esa evaluación y se puede de esa manera construir el instrumento más adecuado para ello; además, permita garantizar que lo que se quiere evaluar responde realmente a lo que se necesita evaluar.
Los expertos en elaboración de pruebas estructuradas exhortan a que los docentes, sigan un procedimiento preciso en la formulación de las preguntas:
1.- Que se especifique una conducta que esté relacionada con el resultado que se espera que el estudiante demuestre que ha logrado durante el proceso de E-A.
2.- Qué condiciones o situaciones debe presentar esa conducta.
3.- el estándar de ejecución.
Para la organización de la prueba de evaluación es importante que el docente tenga en cuenta la estructura de su asignatura, es decir, los objetivos que propuso, las unidades de aprendizaje, los contenidos de cada una de estas unidades, las competencias o logros de aprendizaje planificados. No se puede evaluar aquello que no se ha establecido en el plan original. Además, conviene que la prueba tenga una cierta secuencia, o un orden establecido conforme la micro planificación de la asignatura.
Para la elaboración de la prueba estructurada, que es la de más fácil aplicación y corrección, y que generalmente se recomienda para el final del proceso educativo, es provechoso que, el docente, acuda a la taxonomía de Bloom o de cualquier otro autor, para asegurar que en la prueba se evalúen todos los dominios que el estudiante debió adquirir; pero sobre todo para que el mismo docente sepa con claridad qué es lo que quiere conocer al finalizar el proceso de E-A.
Una vez que el docente decide que es lo o que va a evaluar debe ponderar cada uno de los aspectos a evaluar, que le sirve primero para establecer la importancia que da a cada uno de los aspectos a evaluar y segundo para estructurar el número de preguntas que deben ser proporcionales a esa importancia que asigna a cada dominio.
Si utiliza la Taxonomía de Bloom, tenemos seis dominios que el propone:
Los niveles de dominio se articulan con los procesos mentales y consolidan el aprendizaje, permitiendo al estudiante transitar del reconocimiento de datos, información y tecnología a concretar su clasificación y categorización, comprendiendo las técnicas y métodos que los identifican para generar su propio conocimiento.
Cada docente puede decidir qué peso da cada uno de esos dominios, por ejemplo:
Y como resultado lógico, puede elaborar un número de preguntas para cada uno de los dominios, que sea proporcional y responda al peso que ha dado a cada uno de ellos.
Benjamín Bloom, para cada uno de los dominios estableció una serie de verbos que sirven para que los docentes pudieran redactar los resultados de aprendizaje y las evaluaciones de menara más sencilla y fácil; así en el dominio de conocimiento especifica los siguientes verbos que se pueden considerar:
organizar, reunir, definir, describir, duplicar, enumerar, examinar, encontrar, identificar, rotular, listar, memorizar, nombrar, ordenar, perfilar, presentar, citar, rememorar, reconocer, recordar, anotar, narrar (relatar), relacionar, repetir, reproducir, mostrar, dar a conocer, tabular, decir.
Para el dominio de comprensión e interpretación de la información presenta algunos verbos de acción como:
asociar, cambiar, clarificar, clasificar, construir, contrastar, convertir, decodificar, defender, describir, diferenciar, discriminar, discutir, distinguir, estimar, explicar, expresar, extender, generalizar, identificar, ilustrar, indicar, inferir, interpretar, localizar, parafrasear, predecir, reconocer, informar, reformular, reescribir, revisar, seleccionar, solucionar, traducir.
En el dominio de aplicación, al que lo define como la habilidad para utilizar el materia aprendido en nuevas situaciones, sugiere el uso de los siguientes verbos:
aplicar, apreciar, calcular, cambiar, seleccionar, completar, computar, construir, demostrar, desarrollar, descubrir, dramatizar, emplear, examinar, experimentar, encontrar, ilustrar interpretar, manipular, modificar, operar, organizar, practicar, predecir, preparar, producir, relatar, programar, seleccionar, mostrar, esbozar, solucionar, transferir, utilizar.
El dominio de análisis lo define como la habilidad para descomponer la información en su componente, y presenta algunos verbos de acción que se pueden utilizar:
analizar, valorar, organizar, desglosar, calcular, categorizar, clasificar, comparar, asociar, contrastar, criticar, debatir, deducir, determinar, diferenciar, discriminar, distinguir, dividir, examinar, experimentar, identificar, ilustrar, inferir, inspeccionar, investigar, ordenar, perfilar, señalar, interrogar, relacionar, separar, subdividir, examinar.
De esta manera puede organizar una tabla de especificaciones con el número de preguntas proporcional al peso que ha dado a cada dominio.
La síntesis define como la habilidad para unir diferentes componentes. Siguiere la utilización de los siguientes verbos:
categorizar, recopilar, combinar, compilar, componer, construir, crear, diseñar, desarrollar, idear, establecer, explicar, formular, generalizar, generar, integrar, inventar, hacer, lograr, modificar, organizar, originar, planificar, preparar, proponer, reordenar, reconstruir, revisar, reescribir, plantear, resumir.
Para la evaluación a la que considera como la habilidad para juzgar el valor de los elementos para propósitos específicos, utiliza verbos como:
valorar, determinar (establecer), argumentar, estimar, adjuntar, seleccionar, comparar, concluir, contrastar, convencer, criticar, decidir, defender, discriminar, explicar, evaluar, calificar, interpretar, juzgar, justificar, medir, predecir, considerar (estimar), recomendar, relacionar, resolver, revisar, obtener puntaje, resumir, apoyar, validar, valorar.
Sin embargo advierte que los verbos utilizados en cada una de estas categorías no son exclusivos para cada una de ellas; algunos se pueden aplicar en dos o más.
Para la elaboración de las preguntas estructuradas debe:
1.- Utilizar un lenguaje claro, sencillo, concreto, utilizando las palabras técnicas propias de la asignatura a evaluar.
2.- Las preguntas deben ser sencillas y directas.
3.- Debe cuidar la presentación y la ortografía y el uso de abreviaturas.
4.- Las preguntas no deben dar una pista de la respuesta, ni pie a que el estudiante utilice solo el sentido común, sino que demuestre que conoce y domina el tema.
5.- No se pueden hacer preguntas cuya respuesta exija solo memorización de los contenidos.
6.- Las preguntas pueden seguir una secuencia de dificultad, pero ser independientes entre sí.
En cuanto a la respuesta:
1.- No puede haber más de una alternativa válida, deben responder exactamente lo que se pregunta y de manera satisfactoria.
2.- La respuesta no debe dar pie a interpretaciones.
3.- Evite el uso de formas negativas que pueden confundir al lector.
Formas de elaborar las preguntas, para una prueba de opción múltiple:
No existe una sola forma de presentar las pruebas de opción múltiple, esto quiere decir que pueden ser:
Simple, de jerarquización u ordenamiento, relación de columnas, selección de elementos de un listado, todo depende de qué se quiera evaluar. Es importante anotar que, si un texto tiene gráficos, tablas, o esquemas se debe acompañar la debida explicación.
Qué una pregunta simple: es el planteamiento del problema de manera sencilla en forma de pregunta, generalmente, aunque puede solicitarse que complete una frase. No es aconsejable redactar de forma negativa.
Ejemplo:
El verbo es la parte de la oración que denota:
a) Acción
b) Nombre de persona o cosa
c) Cualidad
d) Cantidad
Este mismo tema lo puede presentar como una pregunta simple:
¿Qué es el verbo?
a) Acción
b) Nombre de persona o cosa
c) Cualidad
d) Cantidad
Una tercera forma que puede presentar esta pregunta es la siguiente:
El verbo es la parte de la oración que denota ………………………..
Cuáles son las preguntas de jerarquización u ordenamiento:
Sirven para elegir una opción que se da de forma secuencial u ordenada, en base a algún criterio y el número de elementos a ordenar no debe ser muy grande.
Ejemplo:
Ordene las principales ciudades del Ecuador de acuerdo a su importancia económica:
Quito,
Ibarra,
Guayaquil,
Ambato,
Cuenca,
Riobamba
Selección de elementos en un listado
El estudiante debe elegir entre distintos elementos de una lista que se le presenta para establecer la capacidad que tiene de discriminación.
De la siguiente lista separe los que fueron presidentes constitucionales del Ecuador de los que no lo fueron:
Guillermo Rodríguez Lara
Sixto Durán Ballén
Lucio Gutiérrez
Rodrigo Borja
Bibliografía
Bloom, B. et al. (1990): Taxonomía de los objetivos de la educación: Clasificación de la meta educacional. Buenos Aires: El Ateneo.
Dr. Kennedy Declan, REDACTAR Y UTILIZAR REULTADOS DE APRENDIZAJE .
Un manual práctico
Leyva Barajas , Yolanda Edith. Evaluación del Aprendizaje: Una guía práctica para profesores
Santos Guerra, M. A. Santos Guerra, M. A. (2003) Una flecha en la diana. Madrid: Narcea (2003) Una flecha en la diana. Madrid: Narcea
Vega. María Universidad Complutense de Madrid. Evaluar y calificar desde el aprendizaje. Una propuesta de innovación con estudiantes universitarios 1
Autor:
Maria de Lourdes Dousdebes.