EL FABULOSO MUNDO SUBTERRANEO
DEL ESTADO DE GUERRERO
MEXICO
(la. PARTE)
ARTURO LOZANO HUBE
DERECHOS RESERVADOS
TEL. 552-89-00
MEXICO, D. F.
–
INDICE.
I .
IN'mCX:UO:IOO
EL FABUI.000!-n.JNOO SUBTERP.AKID
DEL ES'mOO DE GUERRE'PO
l-1EXIOO.
• • • • • •
II. EL ID1BRE Y IAS CAVEFNAS.
III ESPELro EN'rnOP(][.(X;IA. • •
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•5
"N
ESPELID ARQUEX:)L(X;IA. • • .
.18
V CF.IGEN Y FORMACICN DE US CAVERNAS.
,n ESPEI.00 M:>RFQr.a.;IA. • • • • • •
VII RICS SUBTERRANEx::s • • • • • • •
VIII IA VD3F.17CIC1'1 ?.L.. • • • • •
IX EL P.EIOOANIMAL EN IAS CAVERNAS •
.34
.37
•4O
.SO
.62
X
XI
XII
ESPELED 'lURISM'J. • • • • • • • •
ESPELro EXPLORACION. • • • • • • • • • •
UOO FU'lUR) DE AIGtJNAS CUEVAS Y CAVERNAS.
•64
•73
.76
•77
•79
.80
.81
XIII CYmAS PRCFUNDIDADES. • • • • •
XIV RUrA 'ruRISTICA ZONA OOIDILIPA. • •
? W.PA ESTAOO DEGUEP.RmO
? BIBL!CGPJFIA. • • • • • . • • • •
INDICE
ABREVIA'IUPAS:
INAH: Instituto Nacional Antrop:iloqia e Historia.
UNAM: Universidac. Autorrrra de r-'éxico.
CFE : O::rnisi6n Fe:ieral de Eléctricidad.
SARH: Secretaria de Jlgricultura y Recuroos Hidraulicos.
IPN
(.J1lJG
Instituto Politecnio Nacialal
Universidad Autooana de Qladalajara••
l? EDICIOO
1978 200 EJEMPIARES
2? EDICICI-: REVISADA 1980 500 FJH1PLJI..RES.
I N TRODUCCION
Ocho apasionan tes ai'los de explorar cavemos, los marovi llos ahí
contemplados, la esperanzo en su futuro aprovechamiento racional y los gr
tos momen tos convividos con fami l iares, amigos, guías, exploradores y con
los hospitalarios y alegres guerrerenses, me motivaron a traba jar sobre un –
ensayo espe leológ ico de uno de los Estados más agrestes e interesantes de –
México : el de Guerrero.
Los nombres así como las palabras en lenguas vernácu los y alg
nos descripciones se transcriben tal y como se escucharon de los lugorei'los,
–
poro respetar su orig inalidad y ambientar al lector en los m il mitos sobre
cavemos.
E L HOMBRE Y LAS CAVER NAS
E l fabu loso mundo formado por ríos subterráneos, cuevas y caver:_
nas, desde las más remotas épocas despertaron el interés de l os habitantes
de nuestro planeta. En ellas el rudo y ob:;ervador n6mada , hombre pre-his-
tórico, fundó su pri mer ref ugio para protegerse de sus congéneres, de las i_!!
clemencias del tiempo, de I ataq ue de las f ieras; para guardar sus incipien-
tes pertenencias y como lugar adecuado para conservar su gran descubri—
miento: e I f uego.
Al cambiar de habitat de acuerdo con las temporadas de caza, –
de recolección de granos, raíces y frutas, dejaron en las cuevas vestigios –
de sus costumbres y de las circunstancias que los rodearon . Allí hay semi-
I las, guijarros , osamentas, carbón , desechos, herramientas, cerámica , teji-
dos, pinturas y grabados rupestres e inhumaciones.
Con el .correr del tiempo ed if icaron rud imentarias habitaciones en
el exterior y poco a poco se f ormaron aldeas y pueblos; pera alabar a sus –
dioses empezaron a construir teocal is y más adelante grandes pirámides co-
mo la del sol en Teotihuacán la cual tiene la pecul iar idad de haber sido –
constru ida sobre una cueva ceremonial . Los ind ígenas, a través del tiempo,
•
han efectuado labores cotidianos y rituales en las oquedades de lo tierra ,-
costumbres éstas que perduran en e I estado de Guerrero.
los corquistodores, tratando de aportar a los indrgenos de sus on
tiguas costumbres, les hicieron creer que las grutos eran la morada cJol De
monio, ( sus Dioses malos ), taponearon algunas bocas a pasajes subterró–
neos y destruyeron adoratorios; los ind ígenas para proteger sus ancestrales –
costumbres cubrieron al9unas entradas a cavernas ceremoniales y por un lar
go período se apartaron de ellas, sólo visitándolas en forma secreta .
En la g loriosa guerra de la Independencia Mexicana , el general
Vicente Guerrero se va l ió de las grutas del Estado que hoy l levo su nom–
bre , para evad irse y pertrecharse en su lucha contra los ejércitos virreina-
les.
En el siglo XVI 11 , la f iebre por el oro, la plata y otros minera-
les y el florecimiento de los mercados y el comercio fueron abriendo nue-
vos senderos y caminos de herradura . Prol iferaron entonces los asa ltantes —
del camino real , los sublevados, los persegu idos; los campesinos tuvieron –
neces idad de buscar nuevas tierras de cult ivo, desmontar los cerros y transJ.
tar por cariadas. Tcxlas estas circunstancias permit ieron al hombre intrépido
adentrarse cada vez más en las profund idades de la tierra .
E n nuestros d ías, miles de turistas admiran y fotograf ían el indes
..
criptible y maravi lloso mundo subterráneo y cientifico, técnicos y explora-
dores denominados espele61ogos* con avidez descubren , analizan, estudian
y cata logan los secretos que ce losamente en la obscuridad guardan las cavi
dades en las entrañas de la t ierra . En un futuro, las internaciones serán al
me nos en parte , con fines de aprovechamiento racional.
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* De l griego spe l ion , caverna y 16gos tratado; persona que se ded ica al –
conoc imiento de las cavernas.
ESPELEOANTROPOLOGIA
De los pobladores de tvesoamérica, f ueron l os sacerdotes y sus-
guerreros con la ténue y rojiza Iuz de sus hachones de ocote , los que ras-
garon la penumbra de las cavidades de lo tierra , para invocar a sus seres-
mitológicos como lo es el dios Tepeyotl corazón del cerro; estos ancestra-
les costumbres y ritos son aún practicados por a lgunos grupos ind ígenas deI
Estado, hab lantes de lenguas como e l nóhuatl, tlapaneco, mi xteco, omuzgo
o popoloco.
En algunas reg iones de la montarla son visitados d iversos caver–
nas por peregri nos que con una fé prof unda van a ped ir el agua y uno bue
na cosecha . Llevan flores, prendas,
semillas y alimentos, sacrifican chi-
vos, guajol otes y pollos , regando su sangre como of rendo y entre los som-
bras y el leve cente llar de cientos de ve las, se ve a los mayordomos. E l –
silenc io es roto por el rezandero y el r itua l termi na con cantos y danzas –
que se pro( ongan por horas o días.
TEPEYOTLY CORAZON DEL CERRO
Las ceremonias para ped ir el agua -costumbre milenaria- se si–
guen practicand o en México y en d iversas partes del g lobo terr6queo, de
–
e l los narraré , como un ejemplo, la que se l leva a cabo junto a una pequ=.
i'ia cueva , en lo a lto del cerro Zacacual tepec ( 1 } en los ú l timos días del mes
de abri l .
T lamat-Quetl
(-el que sabe llamar a la lluvia-) llevando su Xoch
atl Coscat l ( o collar de f l ores ) , se prepara para ir a Tepetlacua ofrendar
en el Atl Zazilia, (día de pedir agua ) a temprana hora, aún bajo el man-
to obscuro de la noche. Los lugareños con an torchas surcan las serpen teontes-
veredas, hasta llegar al Tonalixco ( lugar de los sacrificios ), donde al des-
pun tar el alba y con la cara al sol presen tarán las ofrendas.
T lacmict ia sacrif ica al chivo y al guajol ote , Tlamat Quetl dep
sita l os corazones en la cueva que quedará a l cu idada de Tlapixquet su —
guard ian , hasta que Yoyoicatzi
(-ani ma l ito de las profund idades-} se lo lle
(1 ) Para la localización geográf ica de los sitios que se mencionan
en el trabajo. Ver mapa pág ina # 80
ve o Tepeyotl i (-corazón del cerro-) q ue reci birá lo ofrendo y lo entregará-
º Tloloc
Dios del aguo.
En el Tonol ixco se vierte l o sangre del chivo y lo del guajolote
..
poro que en lo m ismo formo Tloloc vierto el aguo en los campos y vengo –
lo abundancia; Tlomot Quetl invoco al dios de lo natura leza y pide pode_
res y perm iso poro comun icarse con él y tener el honor y dicha de poder –
hablarle,
poro que lo escuche en donde qu iero que se encuentre.
En sus plegarias Tlomot Quetl pide o los vien tos que traigan o –
l os nubes desde los más elevados como
Pone
Orizoba, l xtlazi huotl, Popoc
tepetl y así, por sus nombres algunas veces en náhuot l y otras en español,
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